Era un cinco de Agosto, el día, como suele ser costumbre en nuestras escapadas no nos acompañaba, pues no había dejado de llover en todo el día, y el cielo cada vez se oscurecía más, pero había que aprovechar, pues el seis, Nalabcer y Anjana, marchaban a sus respectivas comunidades.
Tras haber visitado dos casas y una antigua estación de tren con un cementerio de coches detrás de ella hacemos el esfuerzo de buscar un hotel que estaba en el mismo pueblo, en el que Jesús, Algaca y yo habíamos estado hacía unos meses.
Una vez en el coche, comenzamos a buscar el hotel, pero ya era mucho el tiempo que llevábamos dando vueltas alrededor del pueblo, sin localizar el lugar, cuando pasamos por delante de un hotel, que aparentemente estaba en desuso, sin pensarlo dos veces, Jesús aparcó el coche en una calle paralela al hotel.
Fue entonces cuando la lluvia, que llevaba ya tiempo sin mojarnos, repareció con más fuerza que antes: era imposible salir.
Esperamos en el interior del coche quince minutos hasta que la lluvia disminuyese su intensidad.
Fue entonces cuando corrí hacia la fachada del edificio para buscar algún acceso.
Aparentemente el lugar estaba completamente cerrado, los posibles accesos estaban tapiados. Pero quedaba una opción, a la izquierda de la fachada principal , había un corredor con un cristal roto por el que me metí rápidamente.
Tras atravesar otro crsital roto que amenazaba con caerse en cualquier momento, llegué al comedor del hotel.
¿Decepción? Pues si, y bastante grande, después de haber visto varios hoteles en el mismo país que aún mantenían incluso las mesas del comedor junto al cartel que indicaba "reservado" esto era bastante distinto, aún así no le hice ascos y les dije al resto del grupo que entrase.
La cocina, aunque un poco revuelta y con alguna pintada, mantenía todos los utensilios del oficio, y los congeladores.
Una vez que estábamos todos dentro, y no había peligro de que nos viese nadie, comenzamos a explorar el lugar libremente, filmando y fotografiando los muchos detalles que allí había.
Curiosamente, en esta sala, utilizada como almacén de comida, había un grifo, del cual salía agua, otra vez se repite este hecho que cada vez se ve en más abandonos.
Acto seguido accedí por una puerta bastante baja, a la barra del bar, la humedad había hecho que la escayola cediese y que los espejos de las paredes cayesen al suelo.
Los pisos superiores ya me gustaron más, la decadencia de veinte años de abandono era perceptible en todas y cada una de las salas de este residencial portugués.
Continué recorriendo los pasillos que había en la primera planta, a izquierda y a derecha me encontraba habitaciones, todas ellas con sus armarios, mesillas y cama.
Continué ascendiendo, hasta la segunda planta, allí había más de lo mismo, salas con sus camas, sillas etc, pero, en una de las salas, estaba el almacén de ropa de cama, que aún mantenía sábanas y colchas.
Uno de los varios pasillos que había en esta planta, este incluso con cuadros colgados en las paredes, realmente sorprendente.
Cada dormitorio tenía su baño, curiosamente este era distinto a todos lo demás, era más moderno, y parecía que casi no se hubiese utilizado.
Lo que ninguno nos esperábamos es que tras esa ventana iba a ver un patio interior, y menos aún que desde él se accediese a la que seguramente fuese la casa de los dueños del hotel, pues esta contaba con varias habitación y un salón.
El único acceso a esa otra parte del hotel era introducirse por esa ventana y meterse por un cristal roto, pero sin costarnos mucho, accedimos a la vivienda.
Ascendimos, por último a la tercera planta, las escaleras de acceso era mcuho más estrechas que las de acceso al resto de plantas.
Un siniestro cuadro nos daba la bienvenida a la última planta.
La humedad volvía a hacer acto de presencia, en esta ocasión de manera mucho más notable, llegando a haber corroido una habitación entera, pudriendo el colchón y toda la cama... el acceso a unos de los pasillos era bastante complicado si no querías acabar mojándote toda la cabeza...realmente era fantástico!!
Otro extraño cuadro presidia el final de uno de los pasillos.
La moqueta de esta planta estaba podrida, y producía un desagradable olor que acababa por convertirse en un molesto dolor de cabeza...
Sin embargo, nos metimos por otra de las muchas galerías, y el estado cambiaba radicalmente, la cama se mantenía intac6ta a humedades, vándalos e incluso a ratones.
Continuamos recorriendo las pocas salas que nos quedaban de visitar.
En esta habitación no había camas, simplemente había mantas en el suelo.
El lugar no nos había defraudado, es más había sido la mejor forma de despedirnos de el país, y de los grandes compañeros, que un día después marchaban a sus tierras de origen.
Espero que hayais disfrutado del reportaje!!!!!!!!!!!!!
David, gostei muito da reportagem mas devo dizer-te que este sitio não se chama Brasa Z mas sim Brasa 2! :D Abraço e continuação de boas explorações!
ResponderEliminarJoão Obrigado pelo esclarecimento :)
EliminarDoy fe de que sois capaces de cruzar por el agujero de un cristal. El lugar es un poco cutre si lo comparáis con lo visto anteriormente, en cualquier caso entrasteis, eso es lo que importa. Saludos.
ResponderEliminarJajaja, bueno, suena difícil pero no lo era, pues entramos Pilar, Nacho, Jesús, Alberto y yo :)
EliminarPues si, el sitio me recuerda a los residenciales a los que vamos cuando exploramos Portugal, pero este seguro que no tenía wifi xDDD
Un saludo!
Muy buenas fotos, si señor, la foto del pasillo impresionante. Diría que esas moquetas son de Eurotex de allá de los ochenta, me gustan las moquetas igual que las neveras y congeladores, tengo la casa llena de moquetas y una nevera en cada habitación. Un Saludo desde el más anónimo anonimato. Espero encontrarnos de compras
ResponderEliminarMuchas gracias!!!!!!
EliminarJajajaja ok
Un saludo!
Hostia pues no estaba nada mal!
ResponderEliminarSobre todo me han gustado la foto de la barra del bar, la de la habitación del cuadro, los pasillos, las habitaciones intactas y el baño aquél tan sesentero!!
Enhorabuena!!
Yaa estaba intacto! Fue un hallazgo que me alegró bastante, la verdad jajajaja
EliminarGracias!!!!
No las tenia todas consigo aquí pero al final para dentro jeje, aunque en mi opinión no era gran cosa el sitio, lo más flojillo de aquellos días. Saludos Brothers!.
ResponderEliminarJajajaj sii al final entraste :)
EliminarNo, el lugar era bastante cutrillo, pero me gustó tanto por que lo encontramos de casualidad!!!!!!!!
Un saludo Nacho ;)